- Las semillas de cannabis, aunque vengan de la marihuana, no producen ningún tipo de efecto psicotrópico. El verdadero potencial de estas pequeñas semillas reside más bien en su valor nutricional: Una dosis de estas semillas nos proporciona una cantidad casi increíble de proteína, carbohidratos, y grasas.
¡No nos hemos vuelto locos! Veamos algunos de los beneficios de consumir semillas de cannabis:
Contienen mucha proteína
Las semillas de cannabis son una de las pocas fuentes de proteína vegetales que proveen los nueve aminoácidos esenciales, convirtiéndolas en una fuente completa de proteínas, sin nada que envidiarle al huevo o a la carne.
Por cada treinta gramos de semillas de cáñamo, nos llevamos casi diez gramos de proteína. Eso es una relación de peso/proteína bastante cercana a la de la carne vacuna.
Además, la proteína vegetal ha demostrado ser mucho más saludable para el cuerpo que la proteína que viene de fuentes animales: Esta última termina ocasionando problemas de salud después de consumirla por mucho tiempo, especialmente aquella que proviene de carne de vaca y cerdo. La proteína vegetal, sin embargo, es buena para tu salud. La proteína
encontrada en las semillas de cannabis específicamente contienen algo llamado arginina, un compuesto que ayuda a mejorar la salud de tu corazón.
Contienen mucho Omega 3
Aunque no sea precisamente una competencia, las semillas de cannabis son las claras campeonas del omega 3. No existe ningún otro tipo de omega 3 que provenga de un vegetal tan buena como las semillas de cannabis.
Además, está recomendado consumir tres veces la cantidad de omega 6 que consumes de omega 3 para un balance óptimo de estos ácidos grasos en tu
cuerpo: Esta es exactamente la relación de cantidades que tienen las semillas de cannabis. Además, aunque la mayoría de su valor calórico provenga de las grasas, estas semillas no contienen casi nada de grasas
saturadas, que son más bien dañinas para nuestra salud.
Además, las semillas de cannabis contienen una pequeña pero importante dosis de ácido gama-linolénico, un tipo de ácido graso que ayuda a mitigar los efectos de síndrome premenstrual (dolores, mareos, inflamación) además de ayudar a tu cuerpo a regular las hormonas de manera natural.
Contiene mucha fibra
Las semillas de cannabis, tanto con o sin cáscara, son una excelente fuente de fibra. Alrededor de un 20% de la fibra que encontramos en estas semillas es fibra insoluble, un tipo especial de fibra que ayuda a mantener tu estómago, y las bacterias que viven en él, en buena salud. La fibra soluble ayuda a mantener la regularidad intestinal, además de prevenir diabetes y otros problemas cardiovasculares.
Minerales y vitaminas
Las semillas de cáñamo son una fuente rica en las siguientes vitaminas y minerales:
- Vitamina E
- Magnesio
- Fósforo
- Potasio
También proveen una importante cantidad de hierro, zinc, y las siguientes vitaminas B:
- Niacina
- Riboflavina
- Tiamina
- Vitamina B-6
Cómo incorporar las semillas de cannabis a tu dieta:
Ahora que ya sabemos lo buenas que son estas semillas para nuestro cuerpo, el siguiente paso es incorporarlas a nuestra dieta. Ya que esto requiere de un poco más de imaginación que con otras semillas, aquí te dejamos unas cuantas ideas:
- Tostadas: Enciende la cocina y echa un puñado de semillas de cannabis a la sartén. Después de unos pocos minutos, estarán crocantes y listas para comer. Añade sal, y listo: Un snack como ningún otro.
- Leche de cannabis: La leche de cannabis es bastante simple de hacer y súper rica. Remoja las semillas de cannabis la noche entera y, al día siguiente, échalas en la batidora junto con el agua (deberías usar más o menos un litro de agua por cada 100 gramos de semillas). Licúa las semillas hasta que no veas trozos flotando y luego pásalo por un colador. Añade vainilla, azúcar, y tienes en tus manos tu próxima bebida matutina favorita.
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