Que La Laurel es una de las calles más emblemáticas del país para tapear, lo sabemos. Que cada viandante que se deja caer por esta calle se contangia de la cultura gastronómica en cada rincón, también. Pero sobre todo, esta calle es el lugar de encuentro entre los Pintxos y copas de vino que cada uno esté dispuesto a disfrutar.
Quién va a Logroño, sabe a lo que va. Aquí no hay hueco para la improvisación. Hay algo de extrema obligación y es su ruta de Pintxos por la calle Laurel, zona de mayor concentración de bares de la ciudad y cada uno de ellos ofrece un Pintxo diferente. Y qué Pintxo… En uno de los bares, obviamente con copa en mano y Pintxo comandado, nos cuenta uno de los lugareños que esta calle es conocida como “La Senda de los Elefantes”, porque aquellos osados a tomar una copa en cada bar acababan con una buena trompa y a cuatro patas. Y qué razón la de aquel.
Pues allá vamos, haciendo honor a los locales, dispuestos a comernos la calle con un sorprendente Pintxo y bebernos la senda con un afinado Rioja, os contamos los imprescindibles que no debéis perderos;
Bar Soriano
Sin duda, el Pintxo de los Pintxos. No hay otro igual. Parada obligatoria en esta “Senda gastronómica”. Esta familia de Soria demuestra que la belleza está en la sencillez. Así como su icónico Pintxo a base de champiñones. Solo ofrecen uno, ojo al Pintxo. Lo sirven en una torre de 3 champis a la plancha con una gambita encima, la cual mantiene el equilibrio por medio de un palillo que llega hasta una rebanada de pan. El toque final es la salsa secreta de la casa, un aliñado que hace de este Pintxo, un lugar de peregrinación.
No sólo disfrutas del ambiente, dónde en horas clave no cabe ni un alfiler, si no que puedes observar a uno de los cocineros como hace de director de orquesta ante los cientos de “champis” que se preparan para su obra final.
¿Dónde está? Travesía Laurel,2
Blanco y Negro
Es un must por ser el más antiguo y el más clásico de la zona. Cuenta con más de 100 años en sus fogones y es conocido por elaborar los “Matrimonios” más duraderos de la ciudad… o lo que es lo mismo, un bocatín con pimiento verde frito, anchoa y boquerón. Sin duda, queramos o no, con este Pintxo, NOS CASAMOS!!
¿Dónde está? Travesía Laurel,1
Torrecilla
Conocido por sus tostas de Foie a la plancha, delicia para el paladar. Sencillo y sin pretensiones, por supuesto, acompañado de un buen crianza. Salud.
¿Dónde está? Calle Laurel, 15
El Canalla
¿Qué ocurre si unes patata, panceta y una yema de huevo? Simplemente, como su propio nombre indica, EXPLOSIÓN PRECOZ.
No te lo podemos contar, solo tienes que vivirlo. Cuidado con no quemarte de las ganas, y comértelo en un bocado.
¿Dónde está? Calle Albornoz, 1
La Casa de los Quesos
Ya sólo por conocer a su dueño, Agustín Abadía, el “Tato”, el viaje mereció la alegría. Acompañado de excelentes quesos y vinos, nos contaba emotivo entre risas, el origen de la historia del “¡que no te la den con queso!” y su historia personal que le llevó de pasar del fútbol a los quesos.
¿Dónde está? Calle San Agustín, 2
Jubera
Será por bravas en casi todos los puntos geográficos de España. Las del Jubera juegan en otra liga. Ni siquiera la Champions, se han pasado el juego. Crujientes por fuera e irresistibles por dentro. Servidas en una cazuelita de barro cubiertas por una salsa extremadamente perfecta.
¿Dónde está? Calle Laurel, 18
El Perchas
Uno de los locales que no te puedes perder. Aquí la oreja de cerdo es la reina de la casa. La elaboran de diferentes formas, pero si te gusta el picante… es un acierto. Melosa y crujiente a la vez, esta oreja levanta pasiones.
¿Dónde está? Travesía de Laurel, 3
Juan y Pinchamé
Aunque no parezca el mejor “match”, su brocheta de piña con langostinos a la brasa, está como para no dejar ni el palo. Un contraste de sabores dulces y salados que crea sensación. Además, si casi no te queda hueco en el estómago y sólo quieres regarlo con un buen vino, estarás en el lugar adecuado.
¿Dónde está? Calle Laurel, 9
Ángel
A pocos metros del Soriano, y con más espacio en su interior, se encuentra este bar. Hacen lo mismo, una “Torre de Pisa” a base de champiñones y una gambita con un aliñado secreto que acentúa el sabor final. Aparentemente, el Pintxo es el mismo. Claramente, nosotros somos más del Soriano pero para gustos, los colores!
A elegir vosotros mismos!
¿Dónde está? Calle Laurel, 12